miércoles, 20 de junio de 2012


No. 18
Tenemos que vivir…, más que eso, tenemos que aprender a vivir.
La meditación es para uno como la aurora y el crepúsculo para la Tierra.
La dirección del camino es más importante que el camino mismo.
La mirada al futuro no puede ignorar el presente.
No hay que cesar en el empeño del crecimiento  porque en esto consiste “vivir”.
Para desarrollarnos buscamos caminos andados o propuestos por otros,
Y también suceden nuestros propios descubrimientos o experiencias.
Nuestra intuición camina cada día en esta dirección. E invitamos a todos a buscar sus propios caminos para abrazar su propia misión… porque lo importante no es vivir sino para que se vive.

La gracia de los caminos es su novedad.
La novedad no necesariamente viene a confirmar lo que somos o hacemos.
La paternidad es incompleta si no va acompañada de la maternidad.
Lo más grandioso no es nacer ni lo más trágico, morir; sino no descubrir que estamos en la vida para hacer el bien a todos los seres.
A veces lo que llamamos “fortaleza”  es nuestra mayor debilidad. La verdad siempre necesita de la humildad como puerta para entrar. 
La vida tiene un solo sentido verdadero: el camino hacia el otro.
El verdadero otro no es el “alter”, sino el “otro-nosotros”.
La luz alumbra el presente; no el futuro. Todo a su tiempo.
Los raciocinios hoy día se quedan cortos. El ave no puede volar con una sola ala… lo mismo sin ética.
La reconciliación con la Naturaleza es el acontecimiento mas importante de este siglo.
El rumbo de la vida es uno; pero sus avatares muchos.
Las palabras son nuestro intento de expresar el misterio que permanece siempre inabarcable.
La unidad hace la fuerza y hace renacer la vida… es la ley que rige en el Planeta y el Universo.
Me imagino esta red como un hermoso y grande árbol que empieza a dar cobijo a muchas aves que harán sus nidos y en la primavera de la Energía volaran miles de nuevas aves que llevaran su color y canto al mundo.

Cual brazas encendidas…, la unión y unidad nos procura permanecer vivos y en crecimiento.

Avanzar sin desfallecer es la consigna; porque al estar la meta el presente, tenemos la garantía de alcanzarla.
El despojo es parte del enriquecimiento verdadero.  
Y se requiere de valentía para ser libres. Muchas veces la búsqueda de seguridad nos conduce a pactos que al final redundan en nuestro propio estancamiento. El crecimiento requiere de libertad.
Nuestra misión a partir de este  Centro  apunta a aunar fuerzas para dar pasos en esta dirección.

En la noche, brillan las estrellas, y la luz atraviesa el Universo.
Si cada instante es único… la vida es un instante.
La vida parece lenta…, pero avanza sin tregua porque no quiere que caigamos en el aburrimiento
La novedad de cada día siempre nos reanima; y en ella entra  lo positivo y lo negativo.
Me alegro de las nuevas vivencias; luego llegará nuestro turno de ingresar.
El fenómeno de la vida es un proceso que nunca se detiene: Todo es nuevo; y es tan respetuoso de lo antiguo.
Si la verdad está por sobre todo lo escrito y dicho; entonces hay que buscarla guiados por la luz del amor.
La mirada movida por el amor siempre va encontrando la vida y las potencialidades aun entre la fragilidad y debilidad.

Remar contra la corriente siempre ha sido difícil… pero es la única manera de construir los caminos nuevos.
La Energía es tan sensible a nuestros pensamientos y sentimientos, que cuidándolos, la cuidamos a ella.
Poner alegría en cada cosa que hagamos, hace que aquello nazca sonriente.
La debilidad, generalmente, no se anula; se sobrelleva. Esa es la proeza.

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