jueves, 17 de agosto de 2017

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No soñar es peligroso
El lamentable estado del Planeta
Solo se podrá modificar a partir de la gran fuerza de los sueños
Y de los equipos de trabajo de los soñadores.
El camino de la vida invita a caminantes

El ascenso a la tierra es un camino anhelado
Por muchas especies que no desean correr la suerte de desaparecer
La clave: Salir de sí mismos, que se ha convertido en la peor cárcel
Refugio para la insensibilidad y el hastío.


 Con frecuencia lo que se deja de ver es lo que está más cerca
Quizá tenga que ver la creencia que lo más importante es lo que está más lejos
Que se vive ansiando lo que no se posee
Está en uno elegir vivir en la plenitud del presente o en el vacío del futuro.


La senda a lo más importante no es individual
Por eso pocos llegan
Y muchos los que se dan por llegados
Sin admitir que la luz entre por sus ventanas cerradas.

Bastantes creen ya que todo está perdido
Algunos piensan que es posible recomenzar
Y hacerlo todo nuevo
El mundo se debe a los soñadores, no a los ambiciosos.

La humanidad tiene que ver hacia adelante, no hacia atrás
Aquellos en su tiempo también vieron hacia adelante
El pasado puede convertirse en prisión cuando no se le trata como tal
El Espíritu es siempre presente en todo tiempo y lugar.

El ocio físico contribuye a la obesidad, y el mental…
También perjudica la calidad de vida
Hace olvidar que sin la solidaridad se pierde lo fundamental

La razón porque se tiene vida.

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