lunes, 30 de marzo de 2015

jose leandro flores g. – 251
Demasiada energía puesta en el juzgar a los otros
Desperdicio para mirarse con amor y desafío a si mismo
En un tiempo tan breve.

El dolor de la humanidad es inmenso
Porque lo acrecienta la animadversión y el odio
Mas la luz no cesa en desentrañar el amor.

Las abejas de mi sector se ven débiles
Mueren con facilidad y en cantidades
Más no cesan de buscar el polen y proporcionarnos miel.

La palma como símbolo de la vida
Que resiste la aridez
Y se levanta hermosa y fuerte por centenares de años.

El arte convoca al espíritu inquieto
Que busca la belleza, la armonía, la paz
En medio del bullicio hay oasis de arte en el mundo.

La fuerza de la Naturaleza estremece la calma de la noche
Convierte el desierto en mar y la noche en día
Los humanos contemplamos estupefactos

La meditación diaria
Es como el desayuno para comenzar la jornada

No se puede funcionar bien desde la debilidad.

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