lunes, 14 de julio de 2014

jlfg/196

La industria de las armas
No cesan de producir guerras
Porque se alimentan del negocio sucio e inmoral.
El paso de la imaginación a la realidad, obvia la fantasía.
La vida interior
Es la cuna de la construcción del ser
Más que de la dependencia del exterior.

El presente constituye la realidad
Pero no cesan las olas del pasado y del futuro
Como amenaza de tempestades.

El mayor éxito
No lo constituyen los premios         
Sino el descubrimiento  y aceptación de sí mismo.
La proliferación de conflictos bélicos
Demandan de mayor luz
Que irradie el planeta y silencie  la boca de los cañones.

La lluvia ha descendido
Cayendo con tal suavidad
Que ha sido cual un beso prolongado para la tierra

Pese a tanto veneno y transgénicos perversos
La Tierra continúa sin cesar
Obviando toda dificultad para alimentarnos.

La maldad se sigue acumulando
En el negociado de la droga
Que no daña el estomago sino el cerebro de sus víctimas.

Uno de los mayores logros
De la masificación

Consiste en quitar el respeto y aprecio por la política a los ciudadanos.

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